oposición gratificante

Una etapa dura pero gratificante 

 

“La oposición es una etapa dura pero gratificante”. Lo leí por ahí el otro día. Hasta hice una encuesta en Twitter en la que la respuesta ganadora fue esa misma pero con un añadido, “si apruebas”.

Según la RAE, gratificante es que proporciona satisfacción. Si dijera que gratificante es que proporcionará satisfacción, entonces, como se dice ahora, “te lo compro”. Además, gratificar es recompensar o galardonar con una gratificación. Vale, si está diferida, también te compro la frase. Gratificar también significa dar gusto, complacer. A mi la verdad es que la oposición me dio muy poco gusto (el de conocerme a mi mismo a lo sumo) y mas bien me dio muchos disgustos a mi y a las personas que verdaderamente se preocupaban por mi (mi novia/mujer, mis padres, mis hermanos y poco mas). Diría que con la oposición me jugué el tipo y que pude haber pagado bastante caro mi sobreesfuerzo.

Casi en las antípodas del “gratificante” se encuentra otra opinión que me llega y que aboga por acabar “con estos despeñaderos en los que dejan los mejores años de la vida tantas personas” y que sin oposiciones “nadie desperdiciaría lo mejor de la vida en estudiar”, llegando a decir, en lo que para mi es auténtico contrasentido, que “oposiciones como la de notarías deberían estar solo reservadas a los que ya hayan cumplido los 50 años”. Se ve que a los 50 ya nos queda nada por hacer en la vida y podemos tirar el resto a la basura opositando. Entiendo que quiere decir que opositar joven es un desperdicio y que en la edad madura es mejor momento para perder el tiempo o para invertirlo en lo de opositar. No sé, porque a los 50 te queda menos para el hoyo y tal vez no convenga malgastarlo.

Qué manía tienen algunos con lo de perder el tiempo. Cuando yo aprobé, los de mi quinta llevaban ya un tiempo casados, con hijos y trabajando. Ahora muchos de ellos solo piensan en jubilarse mientras que a mi quedan 17 años de ejercicio por delante y me siento como un toro y todavía muy ilusionado con lo que hago.

Por otra parte, empezando a los 50 se va a poner difícil encontrar preparadores.

Al otro lado del ring de uno y de otro, mas allá de la gratificación y de la prohibición de opositar hasta los 50 años, se encuentran aquellos que confiesan que aprobar no les supuso gran alegría sino poco mas que marcar una crucecita en la lista de objetivos o de cosas por hacer antes de palmarla. Como quien señala la casilla a favor de la Iglesia en la renta, mas o menos. Bueno, yo siempre he dicho que mi sensación fue de alivio y no de alegría pero yo aprobé con 34 años y me imagino que es natural que me sintiera así. Probablemente es tan normal como aprobar con menos de 25 años y sentir que no se ha hecho nada del otro mundo porque la oposición ha sido para uno un paseo militar y le ha costado menos trabajo que levantarse a conectar la alarma cuando ya te has metido en la cama. No sé, pero en todo caso, mi padre aprobó con 24 años y unos meses, e hizo dos cursos de Derecho en uno y jamás le oí decir algo parecido (ni por aproximación muy lejana, ni como cuando pasa un asteroide cerca de la tierra y está a dos millones de kilómetros). Mi hermana lo hizo con 27 años y recuerda con horror la oposición y eso que fue la número 2 de su tribunal y no sufrió ningún contratiempo y le vino todo de cara.

 

En todo caso, este es (o era) un país libre y cada uno puede pensar lo que quiera y sentirse como le de la gana. Hasta ahí podríamos llegar.

 

Hasta otra. Un abrazo. Justito El Notario. @justitonotario




 

5 comentarios

  1. Buenas tardes Justito.

    Lo de los 50 añoes me ha dejado ojiplático. Además, yo ya no tengo los temas, los incineré. No hablemos de la vista ni de la ciática.

    ¿Qué edad debe tener entonces un preparador de opositores cincuentones? Que conserve la audición, claro.

    No sé, probaré con el tema 1 de civil a ver si me animo. Ya te contaré.

    PD. se me ha hecho bola el temita. Quizá a los 6o.

    • Hola Dandanovic:

      Aunque sin duda habrá ironía y humor en el comentario, resulta difícil de encajar viniendo de donde venía (un comentario a un artículo de Chaves, el magistrado, en su blog a propósito de mi libro).
      No había pensado en lo de la edad del preparador.
      Creo que yo no soportaría ni media página.

      Un abrazo, Justito El Notario.

    • Otra cosa.
      Me dice la opositora que va mas avanzada:

      “Acabo de leer la solución al caso 74 que te mandé ayer. Está bien que se le den cuentas al negocio complejo que suele salir mucho en dictámenes. La mayoría de los supuestos son resoluciones pero en el último no se cita ninguna y parece que da por hecho que se aplica el 1377 y sin embargo yo creo que es otro negocio complejo”.

      Que nos cuentas?
      Un abrazo, Justito El Notario.

      • Buenas tardes Justito.

        Tanto en la última consulta como en la anterior (donde son varias las Resoluciones que analizan este supuesto, y podríamos añadir la de 15 de julio de 2011) no puede invocarse la presencia de un negocio jurídico complejo y unitario, trato éste que si debe recibir a la hipótesis de adquisición de un bien ya gravado previamente con una carga hipotecaria.

        Cuando la ley aplicable a los efectos del matrimonio exige el consentimiento del consorte para los actos de disposición (y la hipoteca lo es) no cabe eludir la aplicación de las normas imperativas que así lo imponen, en este caso de los artículos 1377.1 CC y 93 RH. El Centro Directivo no se ha enfrentado a esta cuestión, que yo conozca, lo cual es en cierto modo entendible por la dificultad de encajar el negocio complejo y unitario cuando lo que está en juego es el propio poder de disposición, y no consentimientos concurrentes, epidérmicos o no, que gravitan sobre la facultad dispositiva que ostenta el representante legal, orgánico o voluntario.

        En todo caso, mis más sinceros plácemes para la “opositora avanzada”.

        Justito, tengo la sensación de que estás realizando un trabajo formidable. Enhorabuena.

        Un fuerte abrazo.

        • Buenas tardes:
          En unos minutos me conecto para mi clase del CURSO FEAPEN. Hoy toca final de obra y algunas cosas de actualidad (informe de identidad gráfica, por ejemplo).

          Yo, modesta y sinceramente, creo que estamos haciendo una aportación (muy mejorable, claro; aun incipiente pero que irá a mas) ENORME al asunto de los dictámenes.
          Me lo agradecen “nuestros” opositores. Me lo dicen los demás que se relacionan conmigo …
          Pero de los que se dedican a preparar no tengo feedback. No sé lo que les parece. Si bien, si mal.

          Es normal. Cada uno va a lo suyo .. y nosotros a lo nuestro.
          Pero gracias, me animas a seguir luchando. Veremos resultados en poco mas de un año.
          Un abrazo y gracias, Justito El Notario.

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