¿El Notario solo firma y pone la mano para cobrar?

notario solo firma y cobra

“De repente me di cuenta que no hay ninguna razón de peso, que me haga pensar, “me gustaría ser Notario” y llegué a la conclusión de que es porque no sé muy a fondo en qué consiste realmente la profesión”.

Pues no sé si en mi post “De mayor quiero ser Notario” ofrezco respuesta en todo o parte a esta pregunta, pero me apetecía divagar hoy un poco a propósito de este comentario que hace ya unos meses me hicieron a través de mi cuenta de Twitter desde la que me comprometí a darle una respuesta. Sirva por tanto este Opo Flash de respuesta parcial a aquel comentario.

Firmar y poner la mano

Curiosamente mi madre no sabía que era un Notario cuando conoció a mi padre, que lo era, y mi mujer, tampoco lo tenía claro cuando me conoció a mí y supo que mi padre lo era y que yo quería serlo. Parece que todo el mundo va al Notario en algún momento y que todo el mundo sabe qué hace un Notario, pero cómo se lo preguntes fácilmente te harán dos gestos: El de agarrar un boli y hacer como que escribes y acto seguido el de poner la mano en “modo cobro”.

Ana Virginia Botía González es una de las compañeras de la última promoción que han tomado posesión de sus primeras notarías esta misma semana. Hace unos meses decía en el periódico “La Verdad”: «Me da rabia que se diga que los Notarios solo firman». Sin duda Ana Botía tiene toda la razón en sentirse así y lo va a sufrir en sus carnes durante los cuarenta y cinco años que tiene por delante para ejercer nuestra profesión, pero yo tengo la solución y no es otra que trabajar duro para demostrar a todo el que se pasa por la notaría que eso no es así. Esta misma semana, una tanda de preguntas y respuestas con Alberto, un consultante de mi blog, terminaron con este comentario:

” … incluso ya me está gustando (se refería a la profesión de Notario) y todo. Y yo que pensaba que ser Notario era aburrido…”.

Recientemente he mantenido una conversación con mis amigos de Tottributs sobre qué era lo que más nos gustaba de nuestros respectivos trabajos. Yo les dije que nada en particular, que más bien me gusta todo, me gusta el conjunto de mi trabajo.

A mi no me gusta ser un Notario que espera en el despacho a que le entreguen una escritura para leer y que hasta ese momento no sabe nada del asunto de los clientes que van a otorgarla o que va saltando de sala en sala de firmas en idéntica situación.

A mi lo que me gusta es estar pendiente de todo lo que se mueve por la notaría, de quién viene, de quién vendrá, de qué escrituras están en preparación, de cuáles firmamos mañana o pasado o al otro, de porqué no hemos firmado por fin aquello, de estudiar el asunto de la familia Tal, de leerme aquella sentencia, de si habéis o no avisado a Fulano del presupuesto de su asunto, de porqué no se ha expedido esa copia o porqué Mengano todavía no ha pagado su factura o Zutano de tal Banco no ha venido a firmar la diligencia de adhesión en las pólizas de la entidad.

Alguno pensará que no delego. Puede que tenga razón, aunque tal vez yo pudiera decirle a él que delega demasiado.

Aquí lo dejo, pero prometo volver sobre este asunto en cualquier momento.

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Hasta otra. Un abrazo. Justito El Notario. @justitonotario